Microcemento en paredes
El microcemento en paredes es mucho más que un material de alta resistencia. Es un revestimiento decorativo pensado para crear acabados finos, más naturales y de alta decoración. Es el producto ideal para lograr un acabado similar al estuco veneciano.
El microcemento en las paredes otorga una textura lujosa, suave y brillante en medio de acabados de ensueño. Embellece cualquier superficie no transitable y se puede aplicar sobre cemento, yeso u hormigón.
La opción de variar la intensidad del color en cada capa permite conseguir acabados degradados que multiplican las posibilidades decorativas. Las combinaciones cromáticas son infinitas.
Ventajas del microcemento en paredes
Las paredes de microcemento son la solución decorativa para darle un toque especial a cada uno de los espacios de la casa. El revestimiento de pared puede transformar una oficina o vivienda adaptándose a cualquier estilo decorativo.
- Revestimiento pensado en lograr acabados únicos y con la máxima personalización.
- Máxima adherencia y elasticidad.
- Crea espacios con armonía y acabados de alta decoración en cualquier soporte.
- Potencia la luminosidad y amplitud de cada estancia.
- Variedad de colores y acabados.
- Apto para superficies interiores y exteriores, ya que es un material con unas elevadas resistencias mecánicas.
- Mayor durabilidad en comparación con otros revestimientos.
- Resistente a la fisuración y a las altas temperaturas.
- Facilidad de limpieza y mantenimiento.
Galería de microcemento en paredes
Acabados de microcemento en paredes
Los revestimientos de microcemento se caracterizan por el efecto aguas, algo especialmente relevante para potenciar el valor decorativo del revestimiento en la pared. Este efecto, que es menos visible con los colores más claros, otorga un aspecto natural y artesanal a la superficie.
Los acabados lisos son la mejor puesta en escena para el microcemento en paredes, ya que permiten crear un revestimiento dotado con la máxima suavidad y elegancia. La textura fina es una buena elección para que la superficie transmita un estilo sofisticado e inigualable.
Una pared más lisa es el marco perfecto para que luzca el revestimiento de microcemento y potencia el estilo decorativo del espacio.
Los acabados rústicos son una apuesta para dotar a la estancia de un aire más tradicional. Para crear esta estética en las paredes hay que apostar por una granulometría más grande, lo que proporciona una textura más rugosa. Este tipo de acabado también exige una coherencia estética con la decoración del hogar, lo que implica que todos los elementos deben respirar el mismo aire tradicional.
La elección de acabados no se limita a la aplicación del microcemento. Con el sellado final de la superficie se puede elegir el aspecto de la capa protectora: brillo, mate, satinado o supermate.
Microcemento en paredes: revestimiento de alta decoración
El microcemento en paredes es sinónimo de espacios únicos, pero la decoración con revestimientos de pared abarca muchas posibilidades que se pueden combinar a la perfección con el microcemento.
Las veladuras metálicas son el mejor aliado para aportar frescura y potenciar los acabados artísticos del microcemento. Estas pinturas sirven para dar efectos de volumen o brillo al revestimiento.
La asociación del microcemento con las veladuras es ideal para darle un toque artístico a las paredes y cuidar al máximo los detalles de los acabados.
Reviste paredes de forma rápida con un producto que, a diferencia de la pintura plástica y el yeso, resiste golpes eventuales.
La combinación de microcemento y veladuras en paredes ofrece impresionantes posibiliades creativas y un sello personal inconfundible en cualquier proyecto de interiorismo. Las posibilidades creativas no tienen límites.
Consejos para aplicar microcemento en paredes
Determinar si la superficie es absorbente o no absorbente. Si la superficie es porosa, se debe aplicar una imprimación para morteros y yesos con el objetivo de facilitar la adherencia.
Si la superficie no es porosa, hay que aplicar un promotor de adherencia para superficies no absorbente para facilitar la adherencia con el mortero. Este es el caso de los ladrillos o los azulejos.
El microcemento en paredes se aplica con llana en capa fina con movimientos cortos en todas las direcciones para romper el dibujo.
Es aconsejable empezar a aplicar el material en la parte superior del soporte e ir bajando paulatinamente.
Cuando se revisten paredes de cuartos de baño con poca ventilación, el aplicador necesita llevar un ventilador para que seque la superficie y no se condense la humedad en el ambiente.
El soporte tiene que estar nivelado, seco, limpio y libre de grasas. La planimetría debe estar en perfecto estado antes de aplicar el microcemento.
La temperatura ideal para aplicar microcemento es entre 15º y 25ºC. En verano cuando las temperaturas llegan a los 30 grados, el material se endurece con mucha rapidez.
Todas las manchas deben eliminarse con rapidez antes de que endurezca el microcemento.